miércoles, 1 de enero de 2014

LA POBLACIÓN NEGRA DE MEXICO




Los pueblos de las siete regiones culturales en que se divide Oaxaca se reúnen anualmente en la Guelaguetza o Lunes del Cerro. Los habitantes de la costa oaxaqueña, descendientes de los africanos traídos por los españoles para trabajar principalmente en la cría de ganado vacuno, acuden a la fiesta con coloridos vestidos que son mezcla de trajes indígenas locales y reminiscencia de aquellos que usaron sus ancestros de África.

Se dijo que tenían color pardo, color de rapadura, color champurrado, color amarillito, color de membrillo, color quebrado. Esta diversidad de tonalidades dio nacimiento a un crecido número de calificativos aplicados a estos mulatos, según el lugar del país de donde procedían. En términos generales podemos afirmar que se les llamaba Cochos en Michoacán, Cambujos en Oaxaca, Chinos en Puebla, Jarochos en Veracruz, Loros en Chiapas y Zambos en Guerrero; para no mencionar sino los más comunes.




Los negros que llegaron como esclavos a México fueron rápidamente asignados a las labores del campo, principalmente al cultivo de trigo y caña de azúcar. La población negra sustituyó a la indígena, diezmada por la viruela y otras enfermedades para las que no tenía anticuerpos, en los primeros años de la conquista. Diego Rivera, La colonización o llegada de Hernán Cortés a Veracruz, Palacio Nacional.



TEXTO COMPLETO EN LA EDICIÓN IMPRESA

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Gonzalo Aguirre Beltrán, La población negra de México, FCE, Colección Tierra Firme, México, 1972.